Cantando la alegría de vivir Sin llegar a la exageración milagrosa, al menos sí podemos aseverar que es raro y un tanto asombroso ver cómo un grupo de personas tan heterogéneo ha podido sobrevivir unido durante veinticinco años a algo tan complicado como es una coral. Gracias a unos benditos locos que comenzaron esta maravillosa andadura de cantar la alegría de vivir allá por 1980, hoy nosotros con casi todos ellos podemos celebrar las Bodas de Plata de la coral salesiana por excelencia de Madrid: ;i>la Coral San Francisco de Sales.Nuestro secreto Otros coros, antes y después de esta fecha, lo intentaron con entusiasmo inicial; pero en pocos años han sucumbido por diversas circunstancias. ¿Por qué no ésta de Salesianos Estrecho? Por tres cosas que nunca han faltado desde sus orígenes: el amor a María Auxiliadora, a don Bosco y al colegio. Sumamos a esto la entrega desinteresada a una causa común: ser felices haciendo felices a los demás con nuestras canciones. ¡Este ha sido nuestro secreto!Nuestro mayor éxito Hemos subido con éxito a grandes y pequeños escenarios de pueblos y ciudades de España. Hemos sido embajadores de Madrid en Viena (Austria). También París escuchó nuestras melodías latinas; y hasta Nuestra Señora de Fátima vio nuestra emoción cantándole su ;i>Cova de Iría. Aún así, las más grandes satisfacciones las hemos sentido cantando para inválidos, para enfermos, para viejecitos que aplauden poco con sus manos cansadas y muchísimo con sus miradas agradecidas debajo de sus frentes arrugadas. Nosotros agradecidos a ellos. No hay mayor placer que dar amor sin esperar nada.La historia continúa El 19 de noviembre de 2005, celebramos el 25 aniversario de la ;i>Coral San Francisco de Sales con una eucaristía solemne y un concierto extraordinario en el que participaron todos los directores y coralistas que lo fueron desde sus inicios. Digno colofón a una historia que, estamos seguros, tendrá continuación en años venideros.Vocación de servicio Desde mi Astudillo natal, toda mi vida he vivido dedicado a la música como niño cantor, como salesiano, como antiguo alumno, como cooperador, como profesor en Salesianos Atocha, como miembro de colectivos de padres. Pero servir durante catorce años ya como director en esta maravillosa coral me ha dado tantas satisfacciones que me sirve de acicate para seguir colaborando hasta que Dios quiera.
Ramón Sendino Ortega
No hay Comentarios