Falleció el pasado 31 de mayo en Sueca (Valencia) a los 57 años. Se distinguió por su carácter afable, cariñoso; irradiaba paz y serenidad. Con Toni, su marido, fallecido repentinamente unos meses antes que ella, trató de inculcar a sus dos hijos valores coherentes con la fe que profesaban ambos. Mari pertenecía a la Junta de la Asociación de Antiguas Alumnas del colegio de las Salesianas de Sueca. Allí participaba de forma activa y comprometida en las fiestas y demás acontecimientos que se celebraban. Sentía inquietud para que los jóvenes que terminaban sus estudios en el Colegio se integraran en la Asociación y siguieran viviendo el carisma salesiano. Amaba a María Auxiliadora y trataba de darla a conocer llevando con responsabilidad el itinerario de una “capillita”.
No hay Comentarios