Intervención de sor Enrica Rosanna La presencia más significativa, por parte de la Familia Salesiana, fue la de sor Enrica Rosanna, FMA y subsecretaria de la Congregación para la Vida Consagrada del Vaticano, que participó en la sesión de apertura de este encuentro. En su discurso, sor Enrica señaló que hoy, los religiosos, religiosas y las congregaciones, “estamos llamados a vivir situaciones inéditas, problemáticas, impensadas, dolorosas” e invitó a “no tener miedo” pues, apuntó, “tenemos el don y la fuerza de la fe” que nos ayudan a descubrir que “Dios quiere fecundar nuestra pequeña historia”. Para la salesiana, “el tiempo presente nos llama a remar mar adentro” y a trabajar juntos pues, dijo, “en un mundo globalizado, necesitamos más que nunca estar unidos” para ser testigos de Jesús y “testigos de esperanza, gente de futuro, que escoge navegar mar adentro, estar en frontera, aún habiendo aprendido de la vida que no es cómodo ni fácil”.Tres consideraciones Durante su intervención, sor Enrica Rosanna ofreció tres consideraciones a la asamblea. En primer lugar invitó a buscar al Dios vivo y verdadero, “sed de Dios” –dijo-, para “dar testimonio de que Dios está por encima de cualquier cosa. En segundo lugar explicó que el camino que lleva al Padre pasa por Jesucristo y, “en un mundo que corre el riesgo de olvidar el nombre bendito de Jesús”, la Vida Religiosa está llamada a ser “memoria viva del Salvador”. Por último, señaló que “la Iglesia tiene necesidad de una Vida Consagrada que ame a Dios y al prójimo”, especialmente a los más pobres y, recordando palabras de Benedicto XVI, invitó a “no ceder jamás al pesimismo y al cansancio”. “Hemos de seguir adelante –concluyó- con confianza, juntos, con audacia, seguros de que el viento de Dios” guía a la Vida Religiosa. Este encuentro fue organizado por la Conferencia Española de Religiosos (CONFER) que ha sido la primera en el mundo que ha hecho una convocatoria de estas características para aplicar a la realidad social y eclesial de nuestro país el Congreso Mundial de Vida Consagrada, celebrado en Roma en noviembre de 2004 bajo el lema “Pasión por Cristo, Pasión por la Humanidad”.
Fco. Javier Valiente
No hay Comentarios